viernes, 1 de abril de 2011

Patricia Urquiola

Nació en 1961 en Oviedo, España. Estudió arquitectura en la facultad de Arquitectura de Madrid. Después en Italia se graduó en el Politécnico de Milán en 1989 (con una tesis tutelado por Achille Castiglioni). De 1990 a 1992 asistió en los cursos de Achille Castiglioni y Eugenio Bettinelli, tanto en el Politécnico de Milán y en la ENSCI, París. En 1991 comenzó a trabajar para la empresa de muebles de Padua Milán,al frente de la oficina de desarrollo de productos, donde también diseñó su primer mueble (junto con Vico Magistretti).

Entre 1993 y 1996 abrió un estudio asociado a dos amigos, trabajando en arquitectura, interiores, tiendas y restaurantes. De 1996 a 2000 se convirtió en directora de diseño Lissoni Associati grupo y en 2001 abrió su propio estudio en Milán, centrándose en el diseño de productos, exposiciones y arquitectura.


Desde que comenzó a firmar sus propios diseños, cumplidos los cuarenta, Patricia Urquiola (Oviedo, 1961) no se ha concedido una tregua. Ni siquiera para dar el salto a firmar proyectos hoteleros en Norteamérica o para ser madre por segunda vez. Primavera tras primavera, año tras año, esta arquitecta encuentra una fracción del mobiliario que parecía solucionada, inamovible e inquebrantable. Y decide darle una vuelta de tuerca. A veces es sólo un gesto. Gran lectora, sabe que son los pequeños hechos verdaderos de Stendhal o los detalles en los que Flaubert veía a Dios los que hacen avanzar las cosas. Aun así, en ocasiones se lanza también a una revolución formal que termina por cambiar las cosas.
Esta primavera, una vez más, la asturiana ha presentado 18 proyectos (entre sillas, sofás o el interior de un coche) y entre éstos ha elegido la gama básica, la más accesible económicamente, del gigante del diseño italiano B&B para lanzar un sofá que se adapta al suelo, al mundo y a las personas creando una topografía propia y diversa. Monolítico y primario, el sofá Bend se pliega al suelo: sube y baja, se ensancha y se estrecha dibujando un movimiento de llenos y vacíos. De respaldo irregular, y con marcadas costuras en contraste, la pieza parece salida de la mano de un escultor y procedente de una materia dúctil. Pero es el diseño y no el cincel lo que logra extraer la forma. Nace de la investigación digital de la arquitecta con modelos en 3D para recrear la imagen del movimiento. Así, dúctil y transformable, este sofá ofrece flexibilidad en cada componente para dibujar incluso un sofá con ascensos y descensos y con asientos en ambas caras. Toda esa creatividad se verá en la próxima Feria del Mueble de Valencia. La primera exposición antológica de una arquitecta-diseñadora que montó estudio hace apenas una década buscará llevar oxígeno a la feria del 28 de septiembre al 2 de octubre. En espera de la muestra, la apuesta apunta a la cima actual del diseño español, crecida y asentada en Milán desde hace dos décadas.

Chaise Longue Antibody

Anteriormente se hizo una revisión en la cama Tufty por B & B Italia y el famoso diseño de Patricia Urquiola, que recibió muy buenas críticas en su introducción. En caso de que guste o lo tiene y desea una mirada igualmente fresco y cómodo en su sala de estar, aquí está el sofá Tufty Tiempo seccional modular. Patricia se inspira en los años 60 y 70 de acuerdo a B & B, y el tiempo Tufty tiene toques de los estilos de Chesterfield y capitonné. Esta belleza se encuentra disponible en la tela y ahora de cuero con pliegues para garantizar un asiento cómodo. La característica modular permite una multitud de configuraciones para la flexibilidad y el uso en casi cualquier superficie de las habitaciones.

Uno de sus últimos diseños es el sofá BEND para B&B Italia, me parece muy interesante esta moderna propuesta de sofá para un salón contemporáneo.
Es un sofá que se adapta al suelo, al mundo y a las personas creando una topografía propia y diversa. Monolítico y primario, este sofá se pliega al suelo: sube y baja, se ensancha y se estrecha dibujando un movimiento de llenos y vacíos.

De respaldo irregular, y con marcadas costuras en contraste, la pieza parece salida de la mano de un escultor y procedente de una materia dúctil, pero es el diseño y no el cincel, lo que logra extraer la forma. Nace de la investigación digital, de la arquitecta con modelos en 3D para recrear la imagen del movimiento.



 

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